Prepara las brasas correctamente. Si quieres que tu parrillada sea un éxito debes empezar con buen pie y cuidando todos los detalles. Enciende la barbacoa con leña o carbón, y espera unos 40 minutos hasta conseguir unas brasas perfectas para empezar a cocinar. Las brasas deben volverse de color gris. No empieces a cocinar hasta que no haya un calor uniforme. Ten en cuenta, también, que la parrilla no puede estar muy cerca de las brasas. Estos consejos son esenciales para empezar a cocinar con tu barbacoa.

Aromatiza las brasas. ¿Te gustaría dar un toque especial a tu comida? ¿Quieres sorprender a los tuyos de una manera original y sencilla? Te recomendamos utilizar hierbas aromáticas o briquetas de carbón con aromas. También puedes utilizar diferentes tipos de leña o carbón o chips de madera para hacer que tu comida obtenga un sabor muy especial.

Utiliza medidas de seguridad. Preparar una barbacoa no es peligroso, pero si se deben seguir unas sencillas medidas de seguirdad para garantizar que no haya sorpresas desagradables. Si necesitas mover la parrilla porque, por ejemplo, tu barbacoa permite varias posiciones, es necesario el uso de guantes de cocina. Cuando sea el momento de girar la comida de la parrilla utiliza pinzas largas, que permitan que puedas mover los alimentos desde una distancia prudencial y sin acercar demasiado las manos a la parrilla.
Antes de hacer una barbacoa procura elegir un lugar habilitado para parrilladas y en una época del año en que esté permitido. Para una mayor seguridad utiliza de una barbacoa con parachispas para evitar incendios.

Echa la sal al final. la sal, en contacto con el calor, hace que la carne produzca líquidos que pueden bajar la temperatura de las brasas. Para evitarlo, echa la sal cuando estés apunto de acabar la cocción.

Rodéate de la mejor compañía. Hacer una barbacoa es la ocasión perfecta para reunirte con tu família o amigos. Un día ideal para pasarlo en grande disfrutando de la buena cocina.